Despu�s de cargar todo el material en la furgoneta (3 tablas, 2 corchos, varias mochilas) y de recoger a mis compa�eros de expedici�n : Peiblos, B�lter, Moro y mi buen amigo Borja, comenzamos a rodar los kil�metros necesarios para atravesar la pen�nsula y llegar a nuestro destino: Peniche. Yo hab�a estado en esa zona dos veranos atr�s, pero no hubo olas y me tuve que conformar con practicar el buceo. Todos hab�amos o�do hablar  de la playa de Supertubos y ten�amos muchas ganas de conocerla.
Durante el viaje (12 horas) pudimos ver todo tipo de personajes portugueses.
Una vez que divisamos la costa  portuguesa nos encontramos con un clima fr�o, nublado.
Para colmo empez� a llover y no encontr�bamos alojamiento.
 

Al final encontramos  un buen lugar para dormir: "La Pensao".
Se nos ech� la noche encima y nos dedicamos a descansar.
Al d�a siguiente  reconocimos las playas de los alrededores, solo hab�a 1/2 metro, pero el tiempo se hab�a levantado y hac�a mucho sol y calor. Conocimos las playas solitarias del norte de Peniche, donde nos encontramos con  paisajes espectaculares y  hasta animales tra�dos por la corriente. Aqu� se nos unieron Txintxilla e Itziar.
Durante los dos d�as siguientes el mar continu� casi sin olas, pero al tercero subi�. Fuimos a Supertubos a ver como estaba y "Sorpresa" hab�a buenas olas, as� que nos metimos.

A medida que pasaba el tiempo se iba poniendo cada vez mejor hasta llegar a olas de metro y medio perfectas, las mejores olas que he visto nunca. Los tubos que ve�amos ola tras ola hac�an honor al nombre de la playa.
El �nico problema era que estaba lleno de gente y los corcheros locales pon�an muy dif�cil coger olas de serie.
Cuando sal� del agua me encontr� con un espect�culo incre�ble, me resultaba dif�cil sacar fotos de Supertubos ya que en casi todas las olas que ven�an alguien se hac�a un tubo. Al d�a siguiente volvimos  a casa, pero no sin antes pasar por esta magn�fica playa y echar un �ltimo vistazo.